Dead Man es una extraña, aunque sin duda interesante película, que Jim Jarmusch dirigió en 1995 (aunque la banda sonora se publicó en 1996). La protagoniza Johny Deep y seguro que todos la habeis visto, así que no creo que sea necesario comentar mas sobre el argumento. De esta manera, empezó una relación de Jarmusch con Neil Young y que tendría continuidad, cuando el cineasta dirigió el documental Year of the Horse, basado en la gira que el caballo hizo durante 1996. Ya llegaremos.

Refiriendonos a Dead Man, comentar que la música, es sin duda algo muy notorio en la peli, ya que los lamentos de la guitarra de Young estan en casi todo momento presentes, y no como música de fondo, sino que es evidente que el director quiere que la oigamos en todo momento y que tengamos en cuenta lo importante que resulta para la historia que se está contando.

¿La B.S.O? Inescuchable como disco en sí. Largos pasajes instrumentales sin demasiada musicalidad, combinados con dialogos del film, durante 63 largos minutos. Lo que en la película resulta casi imprescindible para entenderla, queda totalmente descontextualizado sin imagenes y se convierte en un artilugio solo válido para lucir en las estanterias de los seguidores más recalcitrantes. Ya dije en su momento que fue publicada en vinilo y que creo que el CD no está descatalogado, así que los más audaces, pueden ir a la tienda a comprarlo.

Esto explicó Jarmusch:

«He sido un fan de Neil Young durante muchos años, y estuve escuchando constantemente a Neil Young y los Crazy Horse mientras escribía el guión para Dead Man. Durante el rodaje de la película (y el desplazamiento que supuso), estuvimos también escuchando la música de Neil. Crazy Horse actuaron en Sedona, Arizona durante el periodo de rodaje, y gran parte del equipo asistió al concierto, Desde el inicio del proyecto tuvimos la esperanza de que Neil Young hiciera la música de la película, pero nunca confié realmente demasiado en que ello sucediera. Cuando Neil finalmente vio un primer montaje de Dead Man, y decidió involucrarse en el film, estuve en éxtasis. (Tengo que atribuir esto, tambien al hecho de que Jay Rabinowitz -el editor- habia grabado algunas secuencias, con fragmentos instrumentales de antiguas canciones de Neil, como ejemplo de como su música podia funcionar con la historia).

Ocasionalmente Neil tocó pump organ y detuned piano (lo siento, no se como traducir esto) y guitarra acústica, pero la mayor parte de la música, es con su guitarra eléctrica. Lo que él aportó, eleva la película a otro nivel, entrelazando mucicalmente el alma de la historia con la reacción emocional del propio Neil hacia ella. El tio profundizó en su propió interior, para crear esa música tan fuerte para nuestra película.»

Comentarios